Influencia de la dermatitis atópica en el adulto en su calidad de vida

La dermatitis atópica es una enfermedad de la piel compleja, que suele ocurrir principalmente en la infancia. La frecuencia de dermatitis atópica en la infancia varía entre el 5% y el 20% de la población, dependiendo de la región, siendo mucho más frecuente en países desarrollados. En España, aunque no hay datos oficiales, al menos 1 de cada 10 niños tiene dermatitis atópica. Con estas cifras podemos calcular que hay aproximadamente 1 millón y medio de niños afectados por esta enfermedad.

En España, aunque no hay datos oficiales, al menos 1 de cada 10 niños tiene dermatitis atópica.

En cuanto a los adultos, un 50% de los niños con dermatitis atópica presentan algún síntoma de adultos, como picor, eccemas o sequedad.

En esta entrada de hoy repasaremos un artículo publicado en el Journal American Academy of Dermatology que estudia la influencia de la dermatitis atópica en la calidad de vida en pacientes adultos. Se entrevistaron a más de 300 pacientes adultos con dermatitis atópica y se les preguntó sobre su salud mental, su productividad y los costes que suponía la dermatitis atópica. Se compararon con 7000 personas sin problemas de piel y 300 pacientes con psoriasis.

Influencia sobre el sueño y el humor

El estudio detectó que los problemas de sueño, depresión y ansiedad eran el doble de frecuentes que en la población normal y ligeramente superiores a los pacientes con psoriasis. Estos valores se tuvieron en cuenta en casos diagnosticados por un médico.

Influencia sobre la productividad y gastos indirectos

Los resultados mostraron que los pacientes con dermatitis atópica tienen más absentismo laboral y se estimó una disminución de la productividad valorada en 2000 euros anuales. Los resultados fueron similares a los de los pacientes diagnosticados de psoriasis.

Influencia sobre la calidad de vida global (HRQoL)

El HRQoL es un test que pregunta sobre diversos factores que influyen en la calidad de vida, tanto físicos, emocionales, laborales e incluso espirituales. De forma general los pacientes con dermatitis atópica y psoriasis mostraron peores resultados globales que la gente sin problemas de piel. Especialmente en lo referente al apartado físico y mental.

En conclusion

Los autores concluyen que la disminución de la calidad de vida de los pacientes con dermatitis atópica es notable, afectando tanto a su salud mental como su vida laboral, por lo que recomiendan intentar un control correcto de la enfermedad para minimizar los síntomas y fomentar unos hábitos de vida saludables.

Los problemas de sueño, depresión y ansiedad eran el doble de frecuentes que en la población normal y ligeramente superiores a los pacientes con psoriasis.

Nuestras recomendaciones

Si tienes o crees que puedes tener dermatitis atópica recomendamos acudir a un dermatólogo para realizar un buen control de los brotes, valorar los hidratantes que necesitas según tu tipo de piel y realizar tratamiento para el picor si fuese necesario. En muchos casos sólo es necesario una consulta para mejorar sustancialmente los síntomas. Ten en cuenta que la dermatitis atópica no se cura, aunque con un correcto tratamiento pueden llegar a desaparecer los brotes y los síntomas.

En caso de humor depresivo, ansiedad o insomnio recomendamos también realizar una evaluación de salud mental para fomentar la mejoría global de la calidad de vida.