El uso y abuso de las TIC en la adolescencia

Cualquier conducta normal placentera es susceptible de convertirse en un comportamiento adictivo. Las adicciones no se limitan a las sustancias químicas. Existen otras adicciones sin droga, las adicciones psicológicas.

La ADICCIÓN podría entenderse como una afición patológica que genera dependencia, pérdida de control, resta libertad a la persona y provoca efectos perjudiciales en las diferentes esferas de la vida del individuo y pérdida de interés por otras actividades.

Adicción a la tecnología en la adolescencia

Todas las conductas adictivas están controladas inicialmente por reforzadores positivos – el aspecto placentero de la conducta en sí – pero terminan por ser controladas por reforzadores negativos – el alivio de la tensión emocional, especialmente. Es decir, una persona sin adicción puede usar internet por el placer de la conducta; una persona adicta lo hará buscando el alivio emocional del malestar emocional.

Llevamos unos años ya en un boom tecnológico, junto al cual aparecen también preocupaciones sobre las posibles consecuencias negativas que el uso intensivo de las nuevas tecnologías puede causar en el desarrollo infantil-adolescente.

Las TIC poseen un enorme potencial comunicativo y educativo y suponen consecuencias positivas a nivel laboral, académico, cultural y lúdico; pero también entrañan riesgos: acceso a contenidos racistas, pornográficos, que incitan al consumo de drogas, contacto con personas que pretenden hacer uso de las mismas para infligir un daño al otro, ciberacoso, pérdida de habilidades en las relaciones personales cara a cara, etc.

En estos tiempos podemos decir que muchos niños y adolescentes viven en dos mundos: el mundo real y el mundo digital o virtual.

Clínica Manifiesta

  • Tolerancia: Necesidad de conexión/uso cada vez mayor para conseguir alcanzar el efecto deseado.
  • Sintomatología de Abstinencia: Existe un síndrome de abstinencia inespecífico, ligado a la inquietud y necesidad de conectarse con una irritabilidad subyacente creciente.
  • Alteraciones de humor, impaciencia, tristeza, ansiedad, cuando tienen que interrumpir la conexión o no pueden llevarla a cabo.
  • Respuesta agresiva ante la limitación a la conexión.

Dependencia Psicológica

  • La actividad se convierte en lo más importante, dominando sentimientos y pensamientos. Preocupación por Internet cuando no se está conectado y un impulso irresistible a realizar la conducta.
  • Se limitan las formas de diversión.
  • Se reduce la actividad física, cayendo en hábitos sedentarios.
  • Aislamiento. Soledad, depresión, reducción del bienestar psicológico.
  • Modificación del estado de ánimo: sentimientos de culpa, disminución de la autoestima. Se busca euforia a través de la red.

Abordaje Terapéutico

En primer lugar, debemos llevar a cabo una desintoxicación:

  • Identificar el patrón de la utilización tecnológica.
  • Estimular nuevas actividades no relacionadas con la tecnología.
  • Control y frecuencia ajustados a la edad y al propósito de uso.

Tras esto, es necesaria una fase de rehabilitación, en la que se trabaja una posible patología base u otras patologías que hayan podido surgir. Aquí surge el doble mecanismo: la adicción es consecuencia de un proceso psicopatológico subyacente o bien el uso/abuso de las TIC estimula un cierto automatismo mental que potencia derivaciones psicopatológicas.

El segundo factor en la rehabilitación es la vuelta a las actividades diarias en el domicilio, el colegio y la comunidad, al igual que las interacciones familiares y con amigos habituales. En este proceso es muy importante la participación activa de los miembros familiares, ya que son los que tienen el gran poder de control sobre la adicción, los que pueden identificar factores desencadenantes de reincidencia y los que pueden mantener límites saludables en el uso de las tecnologías.